Hola, si tú también eres seguidora de la bulimia o anorexia nerviosa, o más conocidas para ti como Ana y Mía, creo que te has equivocado de página, pero un momento no te vayas aún, antes de irte termina de leer lo que quiero decirte.
Yo, al igual que tú también tenía un sueño, y era ser más delgada. Buscaba ser una princesa/principe pero mi sueño se volvió contra mí. Sé que al principio todo son ventajas: podías perder dos kilos en cuestión de días, era algo maravilloso! Pero cuidado, porque cuando los sueños se nos van de las manos pueden convertirse en pesadillas, y eso es justamente lo que me pasó a mí.
Hubo un tiempo en que Ana y yo eramos inseparables, yo solo vivía para ella. Sin embargo un día apareció en mi vida también Mía...
Desde ese día perdí el control en mi vida: no sólo ya no era capaz de controlar mis vómitos, la comida o la ansiedad, poco a poco fui aislandome de la gente que me rodeaba, dejé a mis amigos a un lado y deseaba con todas mis fueszas que llegara mi final.
Lo que en un principio parecía algo perfecto se convirtió en el peor de los finales.
No solo me estaba muriendo por fuera, tambíén por dentro. En mi exterior poco quedaba ya de aquella chica sonriente que había sido hace unos meses, sin embargo allí había una persona ojerosa, de aspecto triste, con un pelo quebradizo como el cristal... Esa era yo, un montón de sueños rotos.
Había estado ahogándome en mí pena varios meses, pero un día al no aguantar más pedí ayuda.
Actualmente mi vida es más fácil y aunque aún no estoy totalmente recuperada soy mucho más feliz que antes. No sé si tú alguna vez has sentido algo parecido a lo que yo sentí durante esos meses, pero si es así, por favor no te vayas, quizás aún estés a tiempo, quizás pueda ayudarte, nunca es demasiado tarde!
No hay comentarios:
Publicar un comentario